🕒 Se lee en: 1 minuto
Al operar una franquicia piloto, el franquiciador puede probar la viabilidad de su concepto de franquicia y sistema. Es deseable que la dirección de dicha unidad la lleve la propia empresa. Es imprescindible que la unidad piloto funcione, en lo medida de lo posible, con el mismo sistema descentralizado, puesto que con el tiempo este sistema lo utilizarán el resto de unidades de la franquicia.
Franquiciar se basa en crear un método simple, fácil de aprender y previamente probado. El franquiciador debe ser capaz de demostrar que él ha operado dicho negocio con éxito durante un tiempo suficiente y en diferentes lugares para aceptar y animar a los potenciales franquiciados a invertir sus ahorros en él.
La unidad piloto permite al potencial franquiciador evaluar los factores que formarán las bases de la experiencia y el saber hacer que se transmitirá al franquiciado, tales como el tipo y tamaño del emplazamiento, el equipamiento necesario, los métodos de funcionamiento y los requisitos de marketing y financieros.
La ejecución con éxito de la unidad piloto es esencial para la preparación del paquete de franquicia. La experiencia conseguida con la creación y gestión de dicha unidad ofrecerá las bases sobre las cuales los elementos del paquete de franquicia se estructurarán.